Little Girl Blue (1958)

El álbum debut de Nina sería un punto doloroso para ella en los primeros días de su carrera como cantante; después de algunos años en el circuito de clubes tras no ser aceptada en un par de programas de música clásica, ganó algo de fama ya que su arreglo de "I Loves You, Porgy" se convirtió en un gran éxito. Su sello, Bethlehem, la apresuró a entrar al estudio para grabar este álbum—su álbum más puro como vocalista de jazz—y la convenció de ceder los derechos de todas las canciones aquí por $3,000, que, después de que "Porgy" se mantuviera grande, y después de que "My Baby Just Cares for Me" se convirtiera en un enorme éxito en los años 80 gracias a un anuncio de Chanel No. 5, acabó costándole millones de dólares en regalías. Se puede vislumbrar la dirección diferente que Nina podría haber tomado en su música si hubiera decidido seguir siendo famosa solo como pianista de jazz; este es el álbum más suave y listo para la hora del cóctel en su discografía.

Nina Simone in Concert (1964)

A principios de 1964, Nina firmó con Philips Records, quienes lanzaron este álbum como su primera producción para ellos. Compuesto por canciones de tres actuaciones en Carnegie Hall en 1964, este álbum es notable por su evidente cambio de Nina hacia el activismo de derechos civiles, ya que se preocupaba menos por atraer a las personas que disfrutaban de "I Loves You, Porgy", y más por documentar la realidad del movimiento que se desarrollaba en América. Este álbum presenta su himno de derechos civiles más duradero, “Mississippi Goddam” en una forma más jovial que la que interpretaría más tarde, pero sus palabras aún golpean más fuerte que cualquier discurso. También transforma “Pirate Jenny” de Threepenny Opera en una alegoría para los derechos civiles, haciendo que la canción sea más impactante e increíble que la original. Para un documento de Nina siendo una potencia en vivo, no busques más.

I Put a Spell on You (1965)

El lugar de Nina Simone en el canon de "rock clásico" y "soul clásico" a veces se reduce injustamente a dos canciones de este álbum: su versión respaldada por una sinfonía de "I Put a Spell on You" y "Feeling Good", la canción que más se ha reproducido de ella. La carrera de Nina es demasiado complicada y variada para ser reducida a un solo álbum, o a una sola canción, razón por la cual es tan difícil para la gente sumergirse en su discografía. No sabe por dónde empezar. Dicho esto, este álbum es un fácil primer paso, ya que esas dos canciones mencionadas antes son las que conocen los padres de todos. Consigue esto como un acompañamiento para Nina Simone Sings the Blues, pero no dejes que tu colección de Nina termine aquí.

Pastel Blues (1965)

Sabemos que estás consiguiendo Nina Simone Sings the Blues, pero si podemos exigir que poseas al menos un álbum más de Nina Simone, que sea este. Junto con Sings the Blues, este es el álbum “más completo” de Nina, un disco que muestra su estilo de jazz, su capacidad para cantar blues de una manera tan profunda e impactante, y las canciones de protesta que se volvieron más importantes para ella que cualquier otra cosa que estuviera haciendo (y más importantes para su audiencia). Este álbum tiene su virtuosa interpretación de 10 minutos de "Sinnerman", una canción espiritual tradicional afroamericana, y su icónica versión de "Strange Fruit", que volvió a cobrar gran relevancia cuando se utilizó en Yeezus. También obtienes "Be My Husband", una canción que es solo la voz de Nina y una ligera percusión, un testimonio del poder de su voz que suena como un ejército de músicos haciendo que la canción tenga su peso. Tu colección está incompleta sin este álbum.

High Priestess of Soul (1967)

Una mezcla de canciones folclóricas afroamericanas y gospel, y composiciones originales que suenan como ellas, High Priestess of Soul es uno de los álbumes más animados de Nina; se siente en casa al cantar con fuerza sobre las secciones de metales y los coros de fondo aquí. Fue su último álbum para Philips, y nunca volvería a hacer música que sonara tan ligada a los constructos del pop soul. Eso no significa que no sea esencial; tiene algunas de sus composiciones originales más increíbles, como "Take Me to the Water".

Silk & Soul (1967)

Silk & Soul es la continuación directa de Nina Simone Sings the Blues, y representa un lado de la carrera de Nina que recibe poca atención; su competencia abierta con artistas como Diana Ross y Aretha Franklin, quienes a menudo cubrían las revistas de los medios afroamericanos, y que vendían muchos más discos que Nina.* Silk & Soul* es el álbum de soul más puro que Nina hizo en toda su carrera, e incluso fue nominada a un Grammy por Mejor Actuación de R&B por "Go to Hell" de este álbum, que perdió ante Franklin. Pero también es un testimonio de cómo, incluso cuando Nina intentó enfrentarse a los grandes del comercio de su generación, aún se aseguró de incluir canciones como su increíble versión de "I Wish I Knew How it Would Feel to Be Free".

‘Nuff Said (1968)

Un álbum combinado en vivo/estudio, ‘Nuff Said captura a Nina en la Feria de Música Westbury de 1968, interpretando canciones de los Bee Gees ("Please Read Me" y "In the Morning"), y canciones de Nina Simone Sings the Blues para una audiencia adoradora. Este ha ganado mucha relevancia en la cultura popular actual solo este año, ya que Kanye West sampleó "Do What You Gotta Do" para el "Famous" con Rihanna.

A Very Rare Evening (1969; Wasn’t Released Until 1979)

Necesitamos incluir al menos un álbum especial para coleccionistas en esta lista. Considerado uno de los álbumes más raros de Nina Simone, este set en vivo fue lanzado en el pequeño PM Records en 1979, y estaba compuesto por grabaciones que Nina hizo en 1969 en Europa. Presenta increíbles versiones de canciones de Aretha, los Byrds, Pete Seeger, y más, y estuvo fuera de impresión en EE. UU. desde 1979 hasta que fue reeditado por Tidal Waves Music este año.

Here Comes the Sun (1971)

Una parte subestimada de las habilidades de Nina como intérprete era su capacidad para desmantelar y recontextualizar canciones pop icónicas del día. No estaba cubriendo canciones obscuras; estaba interpretando grandes éxitos, y una vez que Nina se apoderaba de una canción, ya no sonaba nada como la original. Era suya ahora. No hay mejor ilustración de esto que su versión de "My Way" de este álbum de 1971, donde deconstruye la canción, cambia el tempo, y la transforma completamente diferente de la versión que Paul Anka escribió. Hace lo mismo con la canción titular de George Harrison, y con "Just Like a Woman" de Bob Dylan aquí.

Baltimore (1977)

En 1974, Nina Simone lanzó* It Is Finished*, su último álbum para RCA, y lo que fue ampliamente reportado como su último álbum, en general. Pero predeciblemente, cuando volvió de sus estancias en el extranjero y quería promocionarse, volvió al estudio nuevamente, siendo firmada por CTI, un pequeño sello dirigido por el productor de jazz Creed Taylor. Simone expresaría su descontento con el álbum en sus últimos años, denunciando su producción influenciada por el reggae, pero este es otro álbum de Nina que adquirió fama retroactiva, después de que la canción titular de este—una versión de Randy Newman—cobró nueva relevancia durante las protestas del año pasado en Baltimore. Que una canción de uno de sus últimos álbumes en estudio pueda encontrar una nueva vida después de los hechos como un himno de protesta es otro homenaje a la grandeza de Nina.