Revival es la mejor tienda de discos en Wisconsin

Cuando Revival Records abrió en mi ciudad natal de 60,000 personas en octubre de 2009, probablemente estaba escuchando el éxito "Boom Boom Pow" de Black Eyed Peas en mi iPod después de la práctica de voleibol de 8º grado. Ojalá pudiera decir que lo recuerdo, pero probablemente solo unas pocas personas lo hagan.

En una ciudad tan pequeña, uno podría pensar que sería un gran acontecimiento, pero negocios como ese a menudo cierran tan rápido como abren. La apertura recibió un breve artículo con viñetas en nuestro semanario alternativo local Volume One, atribuyendo la apertura de la tienda a "resurgimientos similares de camisetas retro y zapatillas Puma". Era el apogeo de la moda vintage por el simple hecho de ser vintage, y quizá Revival fue en gran medida agrupado como un producto curioso de esa moda, una novedad pasajera. Y tal vez eso fue parte de lo que lo puso en marcha, seguro. Pero la reducción prematura de la tienda a una tendencia no explica por qué se mudó a una ubicación más céntrica en el centro un año después, o por qué continúa prosperando en su tercera ubicación más grande, incluso después de que la locura retro ha disminuido. No explica por qué se ha convertido en un pulso cultural y un pilar querido de nuestra comunidad.

Tan hermosa y solidaria como podía ser, a veces crecer en una ciudad como Eau Claire era sentirse atascado en el medio. Era demasiado pequeña para sentirse grande y demasiado grande para sentirse pequeña. Aunque solo a una hora en coche de Minneapolis, está aislada de otras ciudades importantes, careciendo de tren o rutas de autobús consistentes y asequibles al otro lado del estado o a otras grandes ciudades del Medio Oeste. De niño en Eau Claire—a como en muchas ciudades estadounidenses similares—mi vida se sentía afortunada, rodeada de belleza, pero en gran medida insignificante. Era parte de nuestra psique saber que no éramos magníficos. Y junto con eso, la cultura pop estadounidense se sentía como una abstracción para ser admirada—un mundo reservado para las costas—hasta que nuestra ciudad comenzó a formar parte de ella.

Es inexacto—y, honestamente, bastante molesto—reducir la producción cultural o artística de nuestra ciudad solo a Justin Vernon, pero también es imposible no hablar de su impacto en nuestra ciudad. Cuando For Emma, Forever Ago salió hace 10 años con aclamo nacional, se sintió como una victoria para nuestra comunidad en muchos aspectos. La historia de Vernon le pertenece solo a él, pero lo que la rodeaba se sentía como nuestro. La historia ha sido sensacionalizada por casi todas las publicaciones que han discutido Bon Iver desde su debut—la cabaña, los bosques, el aislamiento, la contemplación—pero la única anomalía real de todo el asunto, en lo que respecta a Eau Claire, fue la apreciación global y la producción de un artista ganador de un Grammy. Alguien de mi ciudad (donde una fábrica de rábano picante es una pieza legítima de nuestra economía) fue parodiado por Justin Timberlake en SNL. Incluso hemos visto nuestra ciudad convertirse en un destino con el ascenso del festival de música nacionalmente conocido Eaux Claires, que se lleva a cabo a orillas de nuestro río. Aunque las implicaciones de tal crecimiento son increíblemente complicadas, ha sido un placer innegable ver cómo lugares como Revival crecen desde cero.

A medida que nuestra percepción pública como un centro creativo en auge prosperaba, naturalmente también lo hacía Revival. Revival comenzó como muchas tiendas de discos: con un amor genuino por la música y lo que podía ofrecer a las personas que podían tenerla en sus manos. Aunque siempre ha existido una comunidad creativa de apoyo en Eau Claire, muchos más residentes—y eventualmente personas de todas partes—comenzaron a reconocerlo, apoyarlo y participar en él, brindando a proyectos creativos y lugares como Revival Records recursos para desarrollarse—y muchos de nosotros tuvimos el humilde placer de crecer junto con ello.

Las cajas de Revival Records en su tercera y actual ubicación. Amileah Sutliff

A medida que llegaba a la mayoría de edad, lugares como Revival me dieron—a mí y a muchos otros chicos—un lugar para descubrir música de manera física y activa, justo cuando podíamos ver a un talento local alcanzar alturas sin precedentes. Entre los discos de 45 rpm colgando delicadamente del techo, el reconfortante olor a moho y el dueño de voz suave y siempre servicial, Billy Siegel, sentí en silencio la emoción del descubrimiento por primera vez. Si estaba gastando todo el dinero de mis trabajos de niñera momentos después de recibirlo, al menos era en un lugar en el que creía, y un lugar que realmente creía en nuestra ciudad.

El sentido de insignificancia de clase trabajadora y ciudad pequeña con el que había crecido evolucionó en un amor y orgullo por mi ciudad natal y una pasión activa por buscar lo que estaba más allá. Revival demostró que no era una tendencia o una moda pasajera, sino un lugar que estaba aquí para la comunidad, así como la comunidad estaba allí para ella. Ese humilde orgullo es palpable cuando entras en la tienda. Puede que no tenga la colección más rara o masiva de vinilos, pero sus estantes silenciosos no son nada estáticos. Es un lugar que está arraigado en la humildad y la belleza de donde vino, y eso es lo que lo hace especial. Eso es lo que lo convierte en la mejor tienda de discos de Wisconsin.

A continuación, la mejor tienda de discos de Michigan.